LA NOVIA
Cuentan la gente antigua de la provincia que a comienzos de siglo a muchos de los pobladores se les presentó el espíritu de una mujer vestida de novia, estas apariciones eran presenciadas por gente que no gustaba de una unión matrimonial; ya sea por celos, por conveniencia o por un amor no correspondido, este espíritu se presentaba y causaba gran estupor a dichas personas haciendo cambiar su negativa; se dice que este espíritu seria de Juana Fernández, joven que vivió en el pueblo y a la cual se le encontró colgada la mañana del día de su matrimonio con su vestido de novia.
Juana Fernández era una hermosa joven de 15 años de una familia de escasos recursos económicos, esta joven vivía enamorada de Alejandro Núñez Joven de 18 años de la misma condición que la muchacha los cuales se correspondían un gran amor desde que eran niños; este amor se vio perturbado por las intenciones de Don Esteban Suarez un adinerado propietario de 50 años de edad quien en su vida las pocas mujeres que se le habían conocido a su lado terminaban por huir de el por los maltratos que este daba hacia sus estas; pero un domingo en que recorría el pueblo este se quedo cautivado con la belleza de la jovencita y por ello decidió que esa seria la mujer que lo acompañaría a toda costa por el resto de sus días.
Don Esteban vivía acosando a la joven para ello la jovencita no veía con buenos ojos las propuestas de este; ante esto el desesperado pretendiente hábilmente se hizo amigo de la familia de Juanita sobre todo de la madre quien si convenía del noviazgo de su hija por obvias razones económicas, pero quien si no veía con buenos ojos esta unión era su padre, pero a este no le quedaba nada que decir ya que el se encontraba sometido a las ordenes de Don Esteban por ser este el subordinado capataz de los terrenos del pretendiente.
Una mañana la madre coordino inescrupulosamente con Don Esteban para que este visite la casa cuando ella y su marido no se encontrasen, para que este pueda poseer a la menor y luego de esto casarse con ella; esa mañana Don Esteban logro entrar a la casa acompañado con un silencio cómplice para así lograr su cometido, luego se dirigió a la habitación de ella donde este se abalanzo sobre la joven, la cual lucho y lucho para que este no logre su cometido dando golpes y arañazos defendiendo con todas sus fuerzas su integridad; los gritos producto de la pelea se podían oír a lo lejos, los cuales fueron escuchados por Alejandro quien se encontraba cerca a la casa de la joven; este llegó y derribo la puerta de un fuerte golpe mientras los gritos de la joven continuaban provenientes de su habitación donde se dirigió el joven enamorado y encontró a Don Esteban quien trataba de arrancar las vestiduras a la aterrada joven, Esteban corrió hacia estos y dio un fuerte golpe al agresor quien cayó a unos pasos de su victima este se puso en pie y luego comenzó una feroz lucha entre los dos de la cual resulto victorioso el joven; Don Esteban logró ponerse de pie con dificultad y mirando a los jóvenes jura que se vengara por lo sucedido. A los pocos días Alejandro fue enviado a Las Lomas a cuidar ganado por su padre cuando de pronto cayó la noche luego de una jornada extenuante de trabajo, Alejandro fue sorprendido a golpes por dos malhechores que habían sido enviados por Don Esteban, el joven lucho por su vida pero fue inútil ya que fue reducido por sus atacantes quienes al creerlo muerto por la golpiza lo tiraron colina abajo.
Al día siguiente los bandidos contaron de lo sucedido a Don Esteban quien creía cumplido su cometido y con ello se comunico con la madre de Juanita y le dice que ahora ya no habría ningún impedimento para que estos se puedan casar para lo cual la madre accede gustosa y convienen que el matrimonio se llevaría acabo dentro de dos días, así la joven recibe la cruel noticia al día siguiente de lo que le estaban imponiendo sus padres, esta trato de escaparse y es atrapada y encerrada en su cuarto donde su madre le comunica de la muerte de Alejandro lo cual sorprende a esta y lanzó un grito desgarrador que hizo volar a los pájaros de ahí cerca, la joven se desplomo y no lo podía creer tenia que verlo con sus propios ojos para ello la madre saca un pequeño crucifijo el cual fue arrebatado por los delincuentes, el cual la joven le había regalado a Esteban y ella sabia que este lo defendería con su vida si fuera necesario.
Al otro día la muchacha se levanta y faltando pocas horas para el medio día hora en la cual ella iba a contraer nupcias forzadamente, la joven toma la fatídica decisión de quitarse la vida, así que con la intención de unirse a su amado en el mas allá se pone el vestido de novia y reza un padre nuestro y suplicó al cielo para reunirse con Alejandro a quien creía muerto y se mata.
Llevados a cabo todos los preparativos y faltando poco para el mediodía la madre se dirige hacia el cuarto de Juana pero esta tenia la puerta cerrada con llave y ante el llamado constante de esta la joven no respondía lo cual le resulto muy sospechoso e hizo creer que esta se había escapado, así que esta corrió hacia la recamara del padre para que este pudiese abrir la puerta; con los gritos de desesperación llega en ese momento Don Esteban y este con la ayuda del padre logran abrir la puerta a la fuerza donde se encontraron con el fatídico cuadro de la muchacha colgada con el vestido de novia en medio de la recamara; ahí los padres recién se dieron cuenta de lo que habían hecho pero ya era muy tarde, el padre se acerco hacia ella para bajarla y encontró la cadenita del joven en la mano de su hija, totalmente arrepentido elevo una plegaria para poder aliviar en algo su dolor, que dios se apiade del alma de su enamorada hija y le permita a esta unirse con su amado.
Al día siguiente el joven Alejandro fue auxiliado por un ganadero que se lo topo en el camino, quien lo llevó a su casa y curo sus heridas por varios días hasta que este estuvo recuperado; luego el joven una vez que se puso en pie se dirigió al pueblo donde su padre lo buscaba angustiadamente y se entero de la sucedido en su ausencia; lo cual el desconsolado joven no podía creer así que se dirigió al cementerio para comprobarlo por sus propios ojos, una vez estando allí ante la tumba de su amada juro que se vengaría llorando desconsoladamente.
Así pasaron los días y el joven visitaba diariamente a su amada pero esto disminuía el dolor del joven causado por la ausencia de Juanita, así que una noche decide ir a la casa de Don Esteban para tomar venganza por sus propias manos y al considerar a este como el único culpable de su dolor; Esteban al trepa la pared con facilidad se dirigió a la habitación principal y cogió un filudo machete que usaba el dueño de casa para asustar a sus trabajadores luego encontró durmiendo al dueño de casa así que este levanto el arma y propino un fuerte machetazo a la altura del cuello lo cual causo que la cabeza del sujeto se desprendiera del cuerpo; Alejandro una vez visto saciada su sed de venganza se dirigió al ropero de este y cogió el traje que iba a usar para su matrimonio Don Esteban, así que se lo coloco para luego dirigirse a al cementerio hacia donde se encontraba la tumba de Juanita y este decidió colgarse en un árbol que se encontraba junto a la tumba de su amada, pensando que con esto ella se reuniría con su amada en la eternidad y seria feliz con ella ya que en vida las circunstancias no se lo permitieron.
Juana Fernández era una hermosa joven de 15 años de una familia de escasos recursos económicos, esta joven vivía enamorada de Alejandro Núñez Joven de 18 años de la misma condición que la muchacha los cuales se correspondían un gran amor desde que eran niños; este amor se vio perturbado por las intenciones de Don Esteban Suarez un adinerado propietario de 50 años de edad quien en su vida las pocas mujeres que se le habían conocido a su lado terminaban por huir de el por los maltratos que este daba hacia sus estas; pero un domingo en que recorría el pueblo este se quedo cautivado con la belleza de la jovencita y por ello decidió que esa seria la mujer que lo acompañaría a toda costa por el resto de sus días.
Don Esteban vivía acosando a la joven para ello la jovencita no veía con buenos ojos las propuestas de este; ante esto el desesperado pretendiente hábilmente se hizo amigo de la familia de Juanita sobre todo de la madre quien si convenía del noviazgo de su hija por obvias razones económicas, pero quien si no veía con buenos ojos esta unión era su padre, pero a este no le quedaba nada que decir ya que el se encontraba sometido a las ordenes de Don Esteban por ser este el subordinado capataz de los terrenos del pretendiente.
Una mañana la madre coordino inescrupulosamente con Don Esteban para que este visite la casa cuando ella y su marido no se encontrasen, para que este pueda poseer a la menor y luego de esto casarse con ella; esa mañana Don Esteban logro entrar a la casa acompañado con un silencio cómplice para así lograr su cometido, luego se dirigió a la habitación de ella donde este se abalanzo sobre la joven, la cual lucho y lucho para que este no logre su cometido dando golpes y arañazos defendiendo con todas sus fuerzas su integridad; los gritos producto de la pelea se podían oír a lo lejos, los cuales fueron escuchados por Alejandro quien se encontraba cerca a la casa de la joven; este llegó y derribo la puerta de un fuerte golpe mientras los gritos de la joven continuaban provenientes de su habitación donde se dirigió el joven enamorado y encontró a Don Esteban quien trataba de arrancar las vestiduras a la aterrada joven, Esteban corrió hacia estos y dio un fuerte golpe al agresor quien cayó a unos pasos de su victima este se puso en pie y luego comenzó una feroz lucha entre los dos de la cual resulto victorioso el joven; Don Esteban logró ponerse de pie con dificultad y mirando a los jóvenes jura que se vengara por lo sucedido. A los pocos días Alejandro fue enviado a Las Lomas a cuidar ganado por su padre cuando de pronto cayó la noche luego de una jornada extenuante de trabajo, Alejandro fue sorprendido a golpes por dos malhechores que habían sido enviados por Don Esteban, el joven lucho por su vida pero fue inútil ya que fue reducido por sus atacantes quienes al creerlo muerto por la golpiza lo tiraron colina abajo.
Al día siguiente los bandidos contaron de lo sucedido a Don Esteban quien creía cumplido su cometido y con ello se comunico con la madre de Juanita y le dice que ahora ya no habría ningún impedimento para que estos se puedan casar para lo cual la madre accede gustosa y convienen que el matrimonio se llevaría acabo dentro de dos días, así la joven recibe la cruel noticia al día siguiente de lo que le estaban imponiendo sus padres, esta trato de escaparse y es atrapada y encerrada en su cuarto donde su madre le comunica de la muerte de Alejandro lo cual sorprende a esta y lanzó un grito desgarrador que hizo volar a los pájaros de ahí cerca, la joven se desplomo y no lo podía creer tenia que verlo con sus propios ojos para ello la madre saca un pequeño crucifijo el cual fue arrebatado por los delincuentes, el cual la joven le había regalado a Esteban y ella sabia que este lo defendería con su vida si fuera necesario.
Al otro día la muchacha se levanta y faltando pocas horas para el medio día hora en la cual ella iba a contraer nupcias forzadamente, la joven toma la fatídica decisión de quitarse la vida, así que con la intención de unirse a su amado en el mas allá se pone el vestido de novia y reza un padre nuestro y suplicó al cielo para reunirse con Alejandro a quien creía muerto y se mata.
Llevados a cabo todos los preparativos y faltando poco para el mediodía la madre se dirige hacia el cuarto de Juana pero esta tenia la puerta cerrada con llave y ante el llamado constante de esta la joven no respondía lo cual le resulto muy sospechoso e hizo creer que esta se había escapado, así que esta corrió hacia la recamara del padre para que este pudiese abrir la puerta; con los gritos de desesperación llega en ese momento Don Esteban y este con la ayuda del padre logran abrir la puerta a la fuerza donde se encontraron con el fatídico cuadro de la muchacha colgada con el vestido de novia en medio de la recamara; ahí los padres recién se dieron cuenta de lo que habían hecho pero ya era muy tarde, el padre se acerco hacia ella para bajarla y encontró la cadenita del joven en la mano de su hija, totalmente arrepentido elevo una plegaria para poder aliviar en algo su dolor, que dios se apiade del alma de su enamorada hija y le permita a esta unirse con su amado.
Al día siguiente el joven Alejandro fue auxiliado por un ganadero que se lo topo en el camino, quien lo llevó a su casa y curo sus heridas por varios días hasta que este estuvo recuperado; luego el joven una vez que se puso en pie se dirigió al pueblo donde su padre lo buscaba angustiadamente y se entero de la sucedido en su ausencia; lo cual el desconsolado joven no podía creer así que se dirigió al cementerio para comprobarlo por sus propios ojos, una vez estando allí ante la tumba de su amada juro que se vengaría llorando desconsoladamente.
Así pasaron los días y el joven visitaba diariamente a su amada pero esto disminuía el dolor del joven causado por la ausencia de Juanita, así que una noche decide ir a la casa de Don Esteban para tomar venganza por sus propias manos y al considerar a este como el único culpable de su dolor; Esteban al trepa la pared con facilidad se dirigió a la habitación principal y cogió un filudo machete que usaba el dueño de casa para asustar a sus trabajadores luego encontró durmiendo al dueño de casa así que este levanto el arma y propino un fuerte machetazo a la altura del cuello lo cual causo que la cabeza del sujeto se desprendiera del cuerpo; Alejandro una vez visto saciada su sed de venganza se dirigió al ropero de este y cogió el traje que iba a usar para su matrimonio Don Esteban, así que se lo coloco para luego dirigirse a al cementerio hacia donde se encontraba la tumba de Juanita y este decidió colgarse en un árbol que se encontraba junto a la tumba de su amada, pensando que con esto ella se reuniría con su amada en la eternidad y seria feliz con ella ya que en vida las circunstancias no se lo permitieron.
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